ANTENAS DE TELEFONÍA MÓVIL
Las estaciones base son, por tanto, uno de los elementos que forman parte de la infraestructura necesaria para el funcionamiento de una red de comunicaciones móviles, y las torres de soporte de las antenas son los elementos más visibles de las mismas.
Las antenas son las que permiten establecer la comunicación con los usuarios de los teléfonos móviles que se encuentran dentro de la zona de cobertura de la estación de base. Además de las antenas, en la estación de base están los equipos transmisores y receptores, y otros elementos auxiliares necesarios para el correcto funcionamiento. Por ejemplo, para garantizar el funcionamiento aún en el caso de cortes de fluido eléctrico, hay baterías; para garantizar el funcionamiento en épocas de calor, hay equipos de refrigeración. Todos estos elementos están dentro de una caseta para protegerlos de la intemperie.
Todas las estaciones base deben instalarse conforme a un proyecto realizado por un técnico competente en la materia que vela por el cumplimiento de todas las normas aplicables relativas a seguridad y protección. Desde cada estación de base existe un enlace que le comunica con otros elementos, centrales, controladores, etc., de la red de comunicaciones móviles.
Para poder conseguir, como se ha dicho antes, suficiente cobertura en el interior de los edificios, y suficiente capacidad para que comuniquen a la vez muchos usuarios, es necesario a su vez instalar suficientes estaciones de base en una ciudad. Además, las antenas de estas estaciones deben situarse en puntos relativamente altos en relación a la media que les rodea. Por ello es habitual instalarlas en lo alto de edificios, procurando minimizar las obstrucciones cercanas.