Efectos de las radiaciones en los animales

 

· Vacas

 

 Las vacas si se ven obligadas a estar en lugares con radiaciones dan menos leche, el pelo se les vuelve lacio e incluso pueden llegar a padecer esterilidad.

En zonas geopatógenas, las gallinas sufren pérdida de plumas y leucemia; los caballos padecen enfermedades cardiacas, ceguera  y reumatismo; ovejas y cerdos se ven afectadas en el hígado

Hay otros animales que prefieren los lugares que desprenden energías negativas. Las hormigas sienten especial predilección por los cruces telúricos y las intersecciones de la red Hartmann, e instalan sus hormigueros justo donde éstos hacen resonancia con las corrientes de agua o las fallas  .En cuanto a las abejas, producen el doble o el triple de miel cuando sus casetas están situadas sobre lugares malsanos.

Los gatos, sacan provecho de esas malas energías terrestres, reequilibran las radiaciones a través de su  piel y las absorben. El lugar favorito del gato en una vivienda son la butaca frente al televisor, o junto al ordenador o en la  cabecera de la cama, cerca del  radio despertador; o que incluso les guste tumbarse encima  o al lado mismo de dichos aparatos. Las energías electromagnéticas que pueden afectar negativamente a los humanos, a ellos no les causan ningún perjuicio.

 

· Embriones de pollo

 

Fueron expuestos embriones de pollo continuamente durante su vida embrionaria (21 días) a las radiaciones electromagnéticas emitidas por el teléfono móvil. La distancia entre los huevos fecundados  y la fuente de radiación procedente del teléfono móvil era de cuatro centímetros por debajo. La intensidad de las microondas dispersadas sobre el dispositivo con los sesenta huevos en experimentación variaba de 16 a 6 V/m. Así mismo con el objetivo de determinar la acción propia de las ondas ELF emitidas por el teléfono , ha estado colocada entre el teléfono y los huevos sin ningún contacto directo una tela metálica de cobre con toma de tierra, de maya igual a 350 micrómetros permeable al campo magnético de las ELF, con el fin de parar la mayor parte de las microondas . Se inspeccionaban los huevos cada dos días en los embriones de tres a trece días de edad, para ver la mortandad embrionaria ,y en el momento de la eclosión ( día 21). La tasa de mortalidad ha sido  del 70%, y en el caso de embriones expuestos a la totalidad del espectro electromagnético del teléfono móvil (microondas + ELF) ha sido de cinco a siete veces más elevada en el caso de los que en los controles correspondientes. La interposición de una malla metálica ha disminuido ligeramente la mortandad de los embriones, que ha sido de 3,5 a 4 veces mayor que la de los correspondientes controles.

 

· Ratones

 

Los ratones prepúberes que tenían  cinco semanas de edad fueron  expuestos durante dos y cinco semanas a los campos electromagnéticos emitidos por el teléfono móvil en presencia o en ausencia del dispositivo de protección contra las microondas, la tela metálica. Se  tomaron  muestras de sangre tras dos y cinco semanas de exposición con el fin de medir la tasa plasmática de hormonas de estrés (hormona adenocorticotropa o ACTH y corticosterona). Se pudo observar una disminución del 43% para la ACTH y del 42% para la corticosterona tras de dos semanas de exposición. Después de cinco semanas de exposición se han evaluado una bajada de 44% para la ACTH y de 26% para la corticosterona. La exposición a las frecuencias bajas (ELF) tras detener la mayor parte de las microondas emitidas por el teléfono móvil, ha provocado una caída del 61% (ACTH) y 30% (corticosterona) tras dos semanas de exposición, y una disminución del 49% (ACTH) y 35% (corticosterona) tras cinco semanas de exposición.

 

En el caso de ratones portadores de tumor de Lewis, que es un  tumor o un carcinoma pulmonar, provoca muy fácilmente metástasis pulmonares. Tras doce semanas de exposición, los ratones han sido inoculados con las células tumorales y el tumor se desarrolló durante tres semanas. Las dosis de la ACTH no revelaron ninguna diferencia entre los ratones de control sin tumor y los ratones portadores del tumor. Sin embargo se mostró  una reducción de la tasa de hormonas en el caso de los ratones cancerosos después de quince semanas de exposición a la integridad del espectro electromagnético emitido por el teléfono, con una disminución media del 55% de ACTH. Aquellos ratones que estaban protegidos por la malla de cobre han mostrado igualmente una disminución media del 55% de ACTH. La presencia del tumor provocó una disminución del 40% de la corticosterona con relación a los ratones sanos. Y la exposición a la totalidad del espectro emitido por el teléfono ha aumentado la caída en 25% con relación a los ratones portadores del tumor no expuestos. La presencia de la malla metálica además acentuó esta disminución y se ha constatado una caída de la corticosterona del 35% con relación a los ratones portadores de tumores pero no expuestos.

 

A la luz de los resultados obtenidos se puede ver que un modelo de tipo toxicológico , es decir condiciones extremas de exposición permanente, podía evidenciar los blancos biológicos sensibles a tales radiaciones. La muerte de los embriones de pollo irradiados y las tasas plasmáticas de hormonas de estrés ACTH y corticosterona en el caso de los ratones sanos o portadores de tumor, ponen de manifiesto la acción biológica de las ondas emitidas por el teléfono celular.