Como otros productos eléctricos y electrónicos, los equipos de electromedicina son susceptibles a las interferencias electromagnéticas. Para minimizar los riesgos que podrían generar tales interferencias, en este caso, nada menos que sobre la vida humana, existen pautas generales y particulares para cada equipo, especificaciones en normativas internacionales, etc.
A consecuencia del rápido desarrollo de las comunicaciones móviles y de la disponibilidad de equipos de altas prestaciones, ha aumentado la utilización de estos sistemas en el sistema sanitario. En particular, los sistemas de emergencia hacen uso de estos medios de comunicación. En este caso, dada la operación de múltiples sistemas y equipos en un entorno reducido con multiplicidad de señales (frecuencias en amplias zonas del espectro electromagnético y potencias de las señales de diferentes órdenes de magnitud), se plantea el problema de la interrelación entre sistemas biológicos y electrónicos. Esta interacción se presenta entre dispositivos electrónicos entre sí y de estos con las personas implicadas en el escenario de la emergencia.
Teniendo en cuenta esta situación y el interés creciente en proporcionar condiciones ambientales seguras no sólo a los pacientes bajo tratamiento, sino también para el personal técnico sanitario, diferenciaremos los efectos de las señales de Radiofrecuencia sobre los dispositivos electromédicos y sobre los seres humanos. La creciente afluencia de la personas al entorno de los Servicios Clínicos de Hospital con sistemas de telecomunicación vía Radiofrecuencia puede generar, y de hecho genera, problemas en el correcto funcionamiento de los Equipos Electromédicos (EE). Es preciso, por lo tanto, delimitar el alcance de estas influencias el EE, y por lo tanto en el paciente y, si fuese necesario, tomar medidas para minimizar sus repercusiones.